Las memorias de dolor, son recuerdos que están en el inconsciente y que, desde allí, van dirigiendo nuestra vida hacia el sufrimiento, la apatía y la tristeza. Estás memorias de dolor, a veces son localizables fácilmente, otras veces no tanto. A medida que vamos haciendo sanación espiritual, salen para fuera y generan cambios en nuestra vida.
Hay algunas, que suelen ser muy difíciles de liberar, debido al tipo de patología que suele presentar esta herida.
Hoy hablaré de tres heridas que se pueden sanar espiritualmente.
Las causadas por el abuso, el aborto y la baja estima, suelen tener la raíz enquistada profundamente en nuestro útero, en nuestro corazón y en nuestro inconsciente. Sin embargo, si nos hemos propuesto sanar estas heridas, hay posibilidades de liberar este dolor y comenzar a vivir plenamente.
Memorias de dolor: Hablemos de la herida del abuso.
A lo largo de la vida tanto mujeres como hombres hemos sufrido diferentes tipos de abuso, abuso físico, emocional, mental, laboral, etc. Desde que existe el poder, siempre ha habido quien lo querido demostrar de alguna u otra forma oprimiendo y abusando a otra persona.
Cuando estos episodios suceden en la infancia, las heridas que dejan son muy profundas y me atrevería a decir imborrables. Cuando decidimos sanar estas heridas, podemos hacerlo paso a paso. Es algo que se va liberando por etapas, como las capas de una cebolla.
Si te has propuesto sanar esta parte de ti, seguro hiciste un gran trabajo, es probable que hayas hecho terapias, formaciones y más, pero, se consciente que habrá que seguir ahondando hasta liberarte del todo la herida. Y, que, con el tiempo, podrás decir que estás libre, que tienes paz. El camino no suele ser fácil, pero es muy liberador y merece la pena transitarlo.
Con la técnica de MATRIZ Divina, podemos ir a la profundidad y liberar. De eso se trata, que seas libre de esas memorias de dolor y que puedas ver tu cuerpo, tu sensualidad y toda tu persona con amor, aceptación y desde la Diosa que habita en ti.
Memorias de dolor: El tema del aborto.
El aborto suele dejar memorias de dolor en el útero y en el alma muy profundas. Haya sido programado o no, de por sí, deja una memoria interior.
A veces aceptamos la decisión que hemos tomado con valentía, pero luego, parece que siempre queda la duda de si hicimos lo correcto y comienza a suceder el castigo, el duelo, el no perdonarnos por lo que hemos hecho.
Otras veces, el aborto sucede de forma espontánea y, en ese caso, el dolor de la perdida queda aferrada al alma muy profundamente. La culpa vuelve a reaparecer y nos mira a los ojos desafiando nuestra integridad como mujeres.
El proceso de sanación espiritual puede ser algo muy bonito, porque podemos reencontrarnos con el ser no-nacido, para abrazarle fuerte, entregarle nuestro amor y despedirnos.
También podemos sanarlo haciendo respiración ovárica y utilizando la técnica de los 1000 pétalos de la formación Matriz Divina, para ir más adentro y ver si aún quedan memorias de dolor.
Ser conscientes que hay dolor en esta perdida, tanto si el aborto se ha programado o no, es el primer paso.
El segundo paso es enfrentar ese dolor, desde el alma, desde la honestidad y utilizar técnicas de sanación espiritual y energéticas que ayuden a liberar esta sensación de culpa.
Ambos temas saldrán a la luz con MATRIZ DIVINA y tendrás que amarte mucho y seguir sanando, no desistir y seguir aprovechando todas las meditaciones y técnicas. Todas ellas están al servicio de tu felicidad y de tu reconciliación contigo, con tu útero y tus decisiones.
Memorias de dolor: La herida causada por la falta de amor en la infancia
Esta herida es la que nos hace, en la edad adulta tener baja estima. La baja estima es algo que va quitándote tu poder y minando todos tus sueños, proyectos y deseos.
Cuando comienzas a reconciliarte contigo como mujer, al despertar cada una de tus Diosas internas y a sanar las heridas que impiden que te ames verdaderamente, la cosa empieza a cambiar. No es un camino sencillo, más bien lleva tiempo, sin embargo, hay forma de ir encontrando donde están las carencias de la infancia para poder llenarte de amor y comenzar a sentir estima por ti misma.
En Matriz Divina, todas las técnicas que te presento son para sanar la baja estima, van a la raíz de ser mujer, para lavar la herida y curarla.
Si bien el empoderamiento, es gradual. Te aseguro que si continuas una y otra vez con las técnicas que en esta formación te presento, habrá cambios profundos y sentirás tu poder. Yo también tenía la estima por el suelo, era súper sumisa y enamoradiza. Sin embargo, he cambiado muchísimo. Me siento tan plena y llena de poder, que mi vida a cambiado de forma rotunda, ahora nada puede detenerme.
Por eso, estoy aquí, tratando de hacer consciencia en las mujeres. Para que comiences a amarte de verdad, para que te perdones y para que sanes tus memorias de dolor.
El camino del empoderamiento espiritual, es eso. Un camino, que hemos de transitar juntas, acompañándonos y apoyándonos.
Estoy al servicio de todas las mujeres que deseen vivir un cambio rotundo en sus vidas.
Si quieres comenzar a SANAR, AMARTE MÁS Y VIVIR TU EMPODERAMIENTO ESPIRITUAL FEMENINO puedo acompañarte:
- Sanación: Transforma tu vida con el curso: “Sacerdotisas Estelares, de la mano de María Magdalena”
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